Según una antigua ley, cada año, en esta fecha, el más alto magistrado en ejercicio debía clavar un clavo en el templo de Júpiter Capitolino. Esta costumbre, que tal vez nació para contar el transcurso de los años, fue utilizada posteriormente para combatir las epidemias, en la creencia de que el mal quedaba aprisionado por el clavo.


lunes, 12 de septiembre de 2011

Fernando Trujillo.

© Extraido de Himnos al Individuo

I

Príncipe Lucifer a quien yo amo, se mi guía y mi inspiración
Te rezo a ti gran portador de la luz, tu que nos diste la sabiduría y el conocimiento
Tu que nos liberaste del yugo de aquel déspota conocido como Yahvé
Tú al que Byron nombro el primer rebelde, eres al único al que le debo mi devoción
Renuncio a Cristo, al sacramento y a su iglesia pues tú eres mi única virtud
Mi iglesia será el pecado, mi dios mi ego, mi ideal tu justicia
Mi amor es tu oscuridad y tu luz
Lucifer fuiste humillado y exiliado por un dios hipócrita
¡Que Dios te tema! Pues su final esta marcado
Lucifer gran dios de la luz líbrame de la moral humana
Déjame acurrucarme en tu pecho
Que tus alas oscuras me den protección
Niego a Dios y a su iglesia
Niego a su Papa y su credo
Niego su sociedad cristiana
Pues todo aquello me aleja de tu ideal

II

Primer gran rebelde, aquel que cuestiono la autoridad del creador
Llamado Satán al ser condenado al Infierno
Creador de la filosofía y padre del conocimiento
Hijo del pecado que con tu osadía liberaste al ser humano
Lucifer elegiste a la mujer para ser tu voz
Escogiste a la serpiente como tu símbolo
La rebeldía es tu piel
El ego tú ideal
La oscuridad es tu hogar
La lujuria es tu sello
Jehová en su trono vigilando
Jesús durmiendo en su miserable cruz
Predicadores y sacerdotes predicando la palabra
El cristianismo es la esclavitud del espíritu
La hostia es la droga del alma
La salvación una cínica mentira.

III

Lucifer con tu espada desgarras a Jesús
Mutilas a Miguel y lo arrojas a Cerbero
Seduces a Maria quien cae bajo tu encanto
Te burlas de Moisés y de sus mandamientos
Arrojas de su pedestal a San Pablo
Juan Diego se surra ante tu presencia
Llora y huye escondiéndose tras la Guadalupana
Reza a aquella mujer sin recibir respuesta
El imbécil es convertido en mártir
La era de Cristo es la gran tragedia cósmica
Herejes, demonios, rebeldes alístense a la causa de Lucifer
¡Por la belleza! ¡Por el arte! ¡Por la vida! Esa es nuestra causa
Lucifer una vez fuiste humillado y en la mierda arrodillado
Elévate estrella de la mañana
Asesina a Dios y a sus ángeles
Arrójalos a la mierda de la que fueron creados
Mi amado Lucifer tu que gobiernas desde el abismo
Déjame abrazar por tu oscuridad
Déjame compartir tu causa
Déjame luchar a tu lado
Al final la victoria será tuyo gran serafín
Un nuevo Eón alumbra al mundo
Lucifer te amo

¡Gloria a ti señor Lucifer!
¡Hail Lucifer!

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